SE CUMPLEN 26 AÑOS DE LA FUNDACIÓN DE LA ASOCIACIÓN BOMBEROS VOLUNTARIOS DE SAN JAVIER

A  raíz de un incendió ocurrido en los galpones de Adolfo Von Wartburg, en mayo del año 1984 surge la idea de fundar en nuestra ciudad, un cuartel de Bomberos Voluntarios. Bajo él lema común para los Bomberos Voluntados «SACRIFICIO, VALOR Y ABNEGACIÓN», la misma se concretó un nueve de julio del año mil novecientos ochenta y cuatro, siendo esta Asociación la número 49 en la provincia.

Si bien varios voluntarios se sumaron a este nuevo emprendimiento, algunos de ellos, los mayores, pasaron a integrar la primer Comisión Directiva y los más jóvenes, el Cuerpo Activo (Bomberos).

Con unas mangueras viejas, baldes y matafuegos donados, se armó un carro que era tirado por el primer móvil que llegaba al cuartel, ubicado en el taller del mecánico Raúl Mendoza quien fue uno de los fundadores y primer Jefe de Bomberos. Se pedía la colaboración del camión regador de la Municipalidad.

Con el aporte de comerciantes, beneficios y, por ordenanza del Consejo Municipal, se descuenta una parte del salario de los concejales de turno y se compra el primer camión autobomba, un Dodge modelo 1961 de 3500 litros de capacidad.

En el año 1986 se compró un chasis Bedford modelo 1962. Mediante adaptaciones, el mismo fue convertido en una autobomba de 8000 litros de capacidad, el cual fue vendido a la Asociación de Bomberos Voluntarios de Alejandra en el año 1995.

En el año 1989, en un galpón alquilado en la calle Libertad, se instaló un nuevo cuartel, el cual sería ocupado durante 5 años y luego, volveríamos al cuartel anterior en el taller deI Jefe Mendoza.

En el año 1992, gracias a una rifa y a distintos beneficios, pudimos comprar nuestra primer ambulancia, una Renault Trafíc naftera. La misma, fue vendida en el año 1994. En ese año y con dinero obtenido de beneficios y de la venta de la anterior Trafic, se compró una Renault Trafic gasolera que tomaría el lugar de su antecesora como ambulancia.

Al año siguiente, el Molino Mocoví S.A. donó un predio dónde decidimos mudar el cuartel y dónde éste se encuentra actualmente. Con dinero obtenido de un festival, se compró un tinglado de segunda mano y se armó en el predio donado. Con el transcurso de los años fuimos levantando paredes, construyendo los baños, construyendo oficinas, etc.

En el año 1996 el M.A.G.I.C. donó 2 camionetas Ford Ranchero modelo 1981 en mal estado. Las mismas fueron ensambladas por nuestros bomberos. Fueron dadas de baja en el año 2003 por contar con una nueva donación y por ser muy difícil su mantenimiento.

En el año 1998 se reparó un carro de un eje para transportar el equipo de rescate.

Durante los siguiente años, distintas Comisiones Directivas mal administraron la Institución, lo cual llevó a que en el año 2000 el Cuerpo Activo solicite la renuncia del total de dicha Comisión por encontrarnos en un déficit económico y monetario de aproximadamente 36.000 pesos.

Esto agravó aún más la situación de la institución, ya que debió mediar la Presidenta de la F.S.A.B.V. (Federación Santafesina de Asociaciones de Bomberos Voluntarios), gracias a lo cual se llegó a un acuerdo de ambas partes de llamar a una Asamblea Extraordinaria para la elección de una nueva Comisión Directiva. La siguiente Comisión logró saldar el total de la deuda en menos de un año.

En el año 2003 la Escuela Agrotécnica de Colonia Mascías nos donó una camioneta Ford F – 100 modelo 1977 totalmente desarmada. La misma fue ensamblada nuevamente por nuestros bomberos y es usada para transporte de personal.

En el año 2005 se compró un camión autobomba Ford F – 600 modelo 72 de 5000 litros de capacidad, y gracias a un subsidio tramitado por el Senador Baucero, se compró una tijera hidráulica expansora marca Halley la cual sirve para cortar puertas y techos de los autos y para que los bomberos puedan hacer un mejor y más rápido trabajo. Antes había que usar una sierra manual.

Además de todo lo mencionado contamos con mangueras, manguerotes, palas, picos, hachas, barretas, 2 escaleras nuevas, matafuegos, 2 tubos para recargar equipos de respiración, 1 motobomba de 41/2 Hp marca Honda, 1 computadora, equipo de comunicaciones, equipo electrógeno, equipos autónomos, equipos de protección mecánica (cascos, guantes, botas, estructurales, etc.), equipos de extricación (tabla espinal, chaleco, collar cervical, etc.), equipos de rescate en altura (sogas, mosquetones, arnés) mochilas Hailey para incendios forestales. Además tenemos, sillas, tablones, 2 freezer, hamburguesera y freidora (las cuales son prestadas a otras instituciones escolares cuando éstas lo requieren).

Las Asociaciones de Bomberos Voluntarios de toda la Argentina, hemos conseguido un subsidio anual desde el año 2004, pero antiguamente sólo contábamos con el aporte voluntario de algunas empresas locales y de los siempre presentes socios para mantenernos además de los beneficios.

Nuevos Provectos:

El primer camión autobomba, se encuentra en reparación y pronto contaremos de nuevo con su servicio. Se le cambiará el tanque de agua de 3500 litros por uno de 7000 litros que estamos refaccionando.

Con dinero del último subsidio estamos ampliando el cuartel. Ya se compró e instaló el techo y próximamente comenzaremos a levantar las paredes.

Si bien contamos con dos autobombas, la capacidad de agua que poseen es pequeña en relación a los incendios que podrían ocurrir. Otro problema es que por la antigüedad de las mismas, constantemente tienen que ser reparadas. Por todo esto, estamos en tratativas para conseguir un camión más moderno.

Queremos también contar con otro vehículo tipo Trafic a fin de convertirlo en ambulancia, ya que por los años y la cantidad de kilómetros de la actual, el mantenimiento es un problema constante.

Es muy necesario también un bote para rescatar cuerpos en el río en los meses de verano.

Por todo lo antes mencionado, siempre estamos dispuestos a trabajar en fiestas, rifas y distintos beneficios y aceptamos la ayuda de cualquier persona o empresa a fin de poder brindar un mejor servicio a la comunidad y así seguir con nuestra desinteresada tarea.

FUENTE: Archivo de Isabel Attademo

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