El proyecto, de autoría de la diputada Marcela Aeberhard del bloque 100% Santafesino, fue presentado en la última sesión de la Cámara Baja y consiste en modificar la Ley N° 10572 de Bibliotecas populares solicitando que se incorpore un bibliotecario por cada biblioteca popular, y estableciendo la inembargabilidad e inejecutabilidad de los bienes de dichas entidades.
En el texto de este proyecto de ley se establece además que para el nombramiento del personal bibliotecario se dará prioridad a quienes ya trabajan en ellas, siempre y cuando realicen los estudios necesarios para ocupar el cargo. También prevé que la selección del personal bibliotecario dependerá de cada Comisión Directiva a cargo de la Biblioteca Popular, tomando en cuenta sus necesidades y los requerimientos de profesionalización. Por último se agrega un artículo por el cual se establece la inembargabilidad y la inejecutabilidad de los bienes muebles e inmuebles de las bibliotecas populares a partir de entrada en vigencia de esta ley.
Promover y preservar la cultura local
Respecto del por qué de esta modificación, la legisladora argumentó que “las bibliotecas populares son entidades comunitarias abiertas a toda la comunidad que ofrecen, en el nivel local, un espacio y servicios para la consulta, la lectura, la expresión y el desarrollo de actividades culturales. En cada comunidad, la biblioteca popular es una institución muy valorada, porque además de ofrecer las funciones básicas de una biblioteca, es un ámbito para la preservación y la promoción de la cultura local. Al mismo tiempo, cada biblioteca es un lugar de encuentro, que garantiza y facilita el ejercicio del derecho a la información de los ciudadanos”.
También se refirió al lugar que ocupan las bibliotecas en la actualidad diciendo que “en los tiempos que vivimos, en donde la sociedad está muy dividida, tenemos que poner en valor estos espacios de encuentro dentro de nuestras comunidades para ir estableciendo vínculos más estrechos entre nosotros”.
“Creemos que es de suma importancia crear el cargo de personal bibliotecario para cada biblioteca popular y también que lo elija al mismo cada Comisión Directiva. Consideramos también muy importante que tenga prioridad el personal que trabaja actualmente en cada asociación civil y que el mismo se capacite como bibliotecario. También consideramos que debemos agregar a esta ley la inembargabilidad y la inejecutabilidad de los bienes muebles e inmuebles pertenecientes a las bibliotecas populares”, finalizó la Aeberhard.
Los fundamentos del proyecto
Entre los fundamentos del proyecto, se indica que la cantidad de Bibliotecas Populares de la Provincia de Santa Fe es escasa con respecto a la satisfacción de las necesidades de consulta y lectura de los ciudadanos, y que como organizaciones civiles -que pese a contar con el apoyo y subsidios de los distintos niveles del gobierno- les resulta sumamente dificultoso a sus Comisiones Directivas afrontar el pago de los salarios y leyes sociales de un bibliotecario que lleve adelante su gestión fundamental.
Muchas veces, sigue diciendo, sus escasos recursos hacen que innumerables Bibliotecas Populares no cuenten con bibliotecarios al frente de la institución. Esto desdibuja la misión de las bibliotecas populares, el sentido de la profesión de bibliotecario y la dirección de la estrategia de los diferentes niveles del estado para formar profesionales y para cumplimentar sus propias políticas de difusión de la lectura y las diferentes expresiones culturales en todo su territorio y para todos sus ciudadanos, dificultando a las propias bibliotecas mantener el compromiso de la Institución con la comunidad.
Sólo se pueden brindar buenos servicios con recursos humanos capacitados, con estrategias que duren en el tiempo, con políticas públicas duraderas que permitan a cada biblioteca satisfacer las demandas culturales de los habitantes de la comunidad en la cual se halla inserta.
Por todo esto se considera de suma importancia crear el cargo de personal bibliotecario para cada biblioteca popular y también que lo elija al mismo cada Comisión Directiva. Considera también muy importante que tenga prioridad el personal que trabaja actualmente en cada asociación civil y que el mismo se capacite como bibliotecario.
FUENTE: Prensa 100% Santafesino