PERSONAJES EN LA HISTORIA DE SAN JAVIER

DOMINGO TARRAGONA (Dominguito). Nació en San Javier – Santa Fe – en el año 1899 y falleció en San Javier,  el  5 de Mayo de 1976.  Dominguito o Minguito “el airao”, como le decían todos, nació en este pueblo día de esos que decimos cualquiera, la partera,  comadre o comedida que atendió a su madre le dijo de la triste realidad y la deficiencia en su pequeño cuerpo.

Con el tiempo se vio y fue más notable su incapacidad, pero no le faltó el cariño y la atención de su poca familia. Cuando fue un poco grande para ir la escuela nadie se anime a llevarlo por sus defectos, al pasar el tiempo consiguió un caballo manso y lento donde se lo montaba para su traslado y así recorrió parte de la zona y después cuando ya no podía montar, siguió su recorrido en auto, carro y con el adelanto llegó a viajar en colectivo. Se lo conoció en Alejandra, Romang, Reconquista y más al norte, también fue hasta la ciudad de Santa Fe, y algún otro lugar. Por su andar no se sabía si ya era viejo o siempre tubo el tiempo en su cuerpo chico y triste. Las procesiones tan de tradición en nuestro pueblo lo contaban como uno más de sus fieles seguidores. Su a destiempo ritmo cantoril religioso, y su paso lento y cansado, demoró el paso de los Santos.

El destino se lo llevó un día de mucho frió, su cuerpito puesto en una oscura y lustrosa caja de madera, fue velado en la Capilla San Roque, demostraba tristeza y pena, los pocos vecinos del lugar fueron los que más se acercaron a despedirlo, algún  que otro familiar que llegó al velatorio, quedaron con las dudas si dejaba algo de lo mucho que se le dio por lastima y por caridad y no por derecho a tener una magra pensión. Todo lo último que recibió con cariño se lo dieron su médico y algunas enfermeras.

La parca le llegó despacito y él en su intento infantil y gastado ya de viejito endeble manoteo imaginariamente creyendo que era un caramelo que se le acercaba. Las manos generosas que cerraron sus ojos, después hicieron construir su pequeña tumba, con pocas palabras en su epitafio ” Aquí está Dominguito”. El Dr., Víctor Attademo junto a Delia Echagüe enfermara estuvieron a su lado hasta el final en el antiguo hospital, hoy  Hogar de Ancianos.

FUENTE: Archivo de Isabel Attademo – Historiadora de San Javier

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